Patatas con bechamel de la yaya Carmeta

Este plato, a pesar de su simplicidad, es muy festivo, y la yaya Carmeta lo suele hacer los domingos en que nos reunimos todos o en fiestas señaladas, y es que a todos nos gusta. Y no penséis que lo pone de plato único, noooo, que cuando se va a casa de los abuelos a comer, nunca se sabe cuando se acaba, y después te tiras una semana a dieta... Jajaja

El origen de esta receta es familiar, se ha hecho toda la vida en casa de mis suegros y no he visto ninguna receta similar, al menos yo hace casi tres décadas que la conozco y no he visto ninguna que se le parezca. Por supuesto, la cocinera siempre es la yaya Carmeta, ¡¡como no podía ser de otra manera!!

Y vamos con esta deliciosa receta, tal cual la hace ella.

Ingredientes:

Dos kilos de patatas.

300 grs. de butifarra blanca cocida.

150 grs. de jamón ibérico o uno serrano bueno, en dos lonchas.

Un pote de paté de cerdo a poder casero.

Seis huevos.

Una cebolla grande.

Aceite de oliva virgen extra.

Mantequilla.

Un litro de leche.

Una ralladura de nuez moscada.

Una pizca de pimienta blanca molida.

Tres cucharadas soperas de harina.

Unas tiras de pimientos morrones asados.

Queso emmental rallado

Sal

 

Preparación:

Pelamos y cortamos en trozos grandes las patatas y las ponemos a cocer en abundante agua hirviendo con un puñadito de sal hasta que estén tiernas. A parte, cocemos también los huevos 10 minutos. Mientras tanto, cortamos en cubitos pequeños la butifarra pelada y picamos fino el jamón, reservamos.

En una cazuela, ponemos un chorrito de aceite y pochamos la cebolla finamente picada,. Cuando esté transparente, sacamos y reservamos bien escurrida. 

En ese mismo aceite, ponemos una cucharada sopera de mantequilla, y, cuando esté caliente, añadimos la harina y le damos unas vueltas, para que pierda el sabor a crudo. Agregamos la leche,  salpimentamos, ponemos la nuez moscada y removemos continuamente con las varillas a fuego medio alto hasta que espese y reservamos, removiendo de vez en cuando, para que no haga capa.

Escurrimos y chafamos con un tenedor las patatas, no han de quedar demasiado finas, en eso está la gracia. Agregamos la lata de paté, un cucharón de bechamel, la cebolla que teníamos reservada, mezclamos bien y repartimos en el fondo de una fuente de horno honda.

A continuación, repartimos por encima la butifarra, el jamón y los huevos picados. Vertemos encima el resto de la bechamel, cubriendo bien, y adornamos con unas tiras de pimiento asado, espolvoreamos el queso rallado y metemos al horno, previamente precalentado a 180º arriba y abajo, hasta que esté doradito. Sacamos y dejamos reposar unos minutos.

¡¡Espero que os guste!!

Bon profit!!