Macarrones con crema de leche y butifarra

Dentro de los platos de pasta, los macarrones son los más socorridos, junto a los tallarines o espaguettis y es que suelen gustar a todo el mundo y se preparan en un plis plas. Esta receta es de las que más suelo preparar en mi casa y que más éxito tienen, tanto entre los mayores, como en los jóvenes y es que queda tan amorosa y rica, realmente deliciosa os lo aseguro y si no que le pregunten a mi familia y amigos, que no la perdonan...jajaja.

Además es de aprovechamiento, pues utilizo las setas que tengo en la despensa o el congelador. Otra receta parecida y que también gusta muchísimo, es la de macarrones con bechamel que publiqué hace ya un tiempo, es algo más elaborada, pero también muy sencilla y muy gustosa. Podéis ver la receta aquí. Aunque esta al no llevar harina resulta muy diferente y más digestiva.

Vamos con la receta.

Ingredientes para 6 comensales:

Medio kilo de macarrones o pennes al huevo, como los queramos llamar.

Una butifarra fresca de pagès, esta media como palmo y medio, o en su defecto salchichas frescas de carne.

Un litro de nata/crema de leche baja en grasa.

Un vaso de leche desnatada, unos 250 ml.
Seis champiñones medianos, laminados.

Una cebolleta mediana.

Un pimiento verde mediano, tipo italiano.

Un diente de ajo pequeño.

Queso Grana Padano rallado.

Queso Emmental rallado.

Un vasito de vino blanco seco.

Aceite de oliva virgen extra.

Una cucharadita de margarina.

Pimienta de molinillo blanca.

Una ralladura de nuez moscada.

Sal.

Preparación:

Quitamos la piel a la butifarra y reservamos. En una sartén amplia ponemos un chorrito de aceite de oliva y la margarina, pochamos el ajo y la cebolleta picaditos, cuando estén transparentes añadimos la butifarra, la esparraquem/deshacemos con las manos y la continuamos separando con un tenedor, cuando esté bien suelta añadimos el pimiento limpio y picado, a continuación los champiñones laminados, salpimentamos, les damos unas vueltas e incorporamos el vino y dejamos evaporar a fuego medio.

A continuación escurrimos el jugo del sofrito sobre una cazuela y reservamos las dos cosas. En una olla ponemos abundante agua, un puñadito de sal y cocemos la pasta al dente. Escurrimos, la ponemos en una fuente de horno y mezclamos con el sofrito, reservamos.

Ponemos a fuego medio bajo, la cazuela en la que tenemos el jugo de la carne, la dejamos reducir un poco y añadimos la nata, junto con la leche, salpimentamos, añadimos la nuez moscada, mezclamos bien con las varillas y añadimos una cucharada sopera de cada queso rallado, seguimos removiendo a fuego muy bajo hasta obtener una crema muy fina y ligera. 

En cuanto estén fundidos y sin que espese la crema  vertemos tres cuartas partes, sobre la pasta, mezclamos bien y acabamos de napar/cubrir con el resto. Espolvoreamos con los dos tipos de queso rallado y gratinamos hasta que tomen un color doradito.

Apagamos el horno, lo abrimos y dejamos reposar unos minutos. Servimos recién hechos, junto a unos cuencos, con los dos quesos utilizados y ya tenemos nuestros macarrones, listos para disfrutar!!!

Si queremos hacerlos más ligeros, podemos no poner butifarra, utilizar leche desnatada y hacer una crema ligera con harina de maíz. También quedarán muy ricos!!!

Espero que os gusten!!!

Bon profit..!!!