Guiso de espárragos trigueros {receta familiar}

Este es un plato también muy humilde y típico de mi Andalucía natal y que mi madre lo bordaba. Y es también mi aportación a este primer reto de Color y Sabor de Temporada, en el que me apetece mucho participar y en el que cada mes se va a proponer una fruta o una verdura. En este caso eran plátanos o espárragos verdes o blancos. 

Este plato se suele hacer de toda la vida, con espárragos trigueros silvestres que tienen un sabor incomparable, pero que en mi localidad es muy difícil encontrarlos. Así que compré unos de cultivo y os recomiendo que sean de calidad y cuanto más delgados mejor. Yo está vez no los encontré así, pero como eran muy frescos y nada leñosos, quise preparar este delicioso guiso de todas maneras, ya que en casa nos encanta y a todo el que lo prueba.

Pues vamos con la receta.

Ingredientes, en mi caso para tres comensales:

Tres manojos de espárragos trigueros a poder ser silvestres, unos 750 gr.

Media cabeza de ajos, unos seis.

Dos rebanadas de pan de pueblo asentado.

Pimentón dulce de calidad.

Un vasito de vino tipo manzanilla.

Unas ramitas de hierbabuena.

Una cucharadita de postre de comino molido. 

Pimienta de molinillo.

Seis huevos.

Sal.

Preparación:

Troceamos los espárragos con las manos, aprovechando todo lo tierno y desechando la parte dura. Lavamos, escurrimos y reservamos. En una cazuela ponemos un chorretón de aceite y doramos los ajos pelados y las rebanadas de pan, sacamos, trituramos con un poquito de agua y reservamos.

A continuación echamos los espárragos, salpimentamos y salteamos unos minutos, añadimos el pimentón removemos y en seguida para que no se nos queme ponemos el vino y el comino. Dejamos evaporar y agregamos la picada, un vaso de agua grande, la hierbabuena y dejamos cocer hasta que estén tiernos pero enteritos que no queden blanduchos. Cuando estén en su punto apartamos y dejamos reposar hasta el momento de servir.

Entonces  ponemos al cazuela al fuego y cuando esté hirviendo a fuego medio, cascamos los huevos y los añadimos separaditos, tapamos la cazuela y los dejamos cuajar al gusto. En casa nos gustan bastante hechos pero cremosos. Servimos recién hecho aompañado de un buen pan blanco y ya los tenemos listos para disfrutar!!!

Como veis es bien sencillo, uno de esos guisos de toda la vida, sencillos, saludables y nutritivos que no se deberían perder y os recomiendo a todos. 

Espero que os gusten!!!

Bon profit..!!!