Guiso de habas y alcachofas con sepia

Un guiso clásico, con dos ingredientes de plena temporada, deliciosos, ligeros y saludables, que ahora con el frío apetece muchísimo el cuchareo. Mi madre hacía un plato parecido, pero con habas secas y sin sepia, que estaba delicioso. 

Receta que tengo que buscar en mis extraviadas libretas, que supongo han de estar todavía en cajas, porque esas recetas no se han de perder nunca, aunque algunas las vayamos cambiando ligeramente y adaptando a estos tiempos en los que somos más sedentarios y no necesitamos tantas calorías.

Vamos con ella que se muy sencilla, pero entretenida.


Ingredientes:

Dos kilos de habas tiernas.
Un kilo de alcachofas tiernas.
Medio kilo de sepia.
Una cebolleta grande o dos medianas.
Dos dientes de ajo.
Dos rebanadas de pan del día anterior.
Dos tomates maduros medianos.
Cuatro huevos cocidos.
Un vasito de vino blanco tipo manzanilla.
Aceite de oliva virgen extra.
Una ramita de tomillo fresco o media cucharadita de café del seco.
Una ramitas de hierbabuena.
Una cucharadita de pimentón dulce de calidad.
Una hoja de laurel.
Sal.

Preparación:

Separamos las habas más tiernitas, les quitamos los extremos, las lavamos, escurrimos y troceamos con su vaina o calzón, las demás las desgranamos. Lavamos, escurrimos y troceamos las sepia, lo reservamos todo.

En una cazuela de barro o hierro como en mi caso, ponemos un chorro de aceite de oliva, freímos las rebanadas de pan y los ajos pelados y reservamos. En el mismo aceite echamos las cebolletas picadas finamente, cuando estén transparentes, añadimos la sepia y las sofreímos, a continuación el pimentón y los tomates rallados, dejamos hacer el sofrito a fuego lento y removiendo de vez en cuando para que no se pegue, hasta que se haya quedado en el aceite.

Ahora añadimos las habas, salteamos unos minutos, agregamos el vino y las hierbas, reservando unas hojas de hierbabuena para decorar, trituramos el pan y el ajo que teníamos reservado, junto a un vaso de agua y echamos a la cazuela, tapamos y dejamos cocer hasta que estén un poco tiernas.

Entonces añadimos las alcachofas, limpias de hojas duras, de posibles "pelillos" interiores y cortadas ya trozos, un poco más de agua y la sal, las dejamos cocer a fuego medio bajo y tapadas, removemos de vez en cuando sin meter la cuchara, para no romper la verdura, con un movimiento circular o de vaivén, para que vaya ligando todo por igual y nos quede un caldo o salsa espesito.

Una vez que esté todo tierno, agregamos los huevos cocidos y picados no muy finos, damos otro meneito a la cazuela, apagamos el fuego, tapamos y dejamos reposar al menos una hora, aunque estos guisos están todavía más buenos de la víspera.

Servimos bien caliente adornado con unas hojas de hierbabuena y acompañado de una buena hogaza de pan y ya lo tenemos listo para disfrutar!!!

Espero que os guste!!!

Bon profit..!!!