Brownie de chocolate y frutos secos

De nuevo comenzamos la semana con dulce, en esta ocasión un delicioso y famoso Brownie norte-americano. Hace mucho que quería hacerlo y no me atrevía, no se porque pensaba que era difícil. Así que, cuando el otro día lo vi en el blog GastroPadi de un buen amigo y estupendísimo cocinillas, lo encontré tan sencillo que no dude en hacerlo. Y, ciertamente, lo es y el resultado ha  sido tan fantástico y a gustado tanto, que pienso repetirlo más a menudo -pero no demasiado, que por desgracia engorda, como todo lo bueno... Jajaja

Vamos ya con esta delicia.

Ingredientes:

250 grs. de chocolate fondant, el pone 200.

100 grs. de frutos secos, yo puse 75% avellanas, 25% nueces.

125 grs. de azúcar.

75 grs. de mantequilla.

75 grs. de harina.

Dos huevos XL

Dos cucharadas soperas de agua.

Una cucharadita de bicarbonato y otra de sal.

10 ó 15 gramos de azúcar vainillado, yo preferí ponerle azúcar normal y una pizca de cardamomo molido.

Preparación:

En un cazo ponemos el agua, la mantequilla, el azúcar y la pizca de cardamomo y con unas varillas removemos hasta que se funda todo y no se note el azúcar. Entonces, incorporamos 200 grs de chocolate, reservando los otros 50 troceado, seguimos a fuego muy bajo y cuando comience a fundirse apartamos y seguimos removiendo hasta que haya fundido totalmente.

Entonces añadimos los huevos, uno a uno mezclandolos bien con el chocolate; a continuación, vamos agregando la harina previamente tamizada, junto con el bicarbonato y la sal, hasta obtener una masa homogénea. Ahora agregamos los frutos secos ligeramente picados y el chocolate que habíamos reservado y removemos con una espátula, hasta incorporarlos bien en la masa.

Untamos una fuente de horno plana y rectangular con  mantequilla y un poco de harina y vertemos la masa. Llevamos al horno, previamente precalentado a 160º, durante aprox. media hora; a mi se he hizo en 25 minutos, por eso hemos de vigilar pinchando con un palillo, aunque por dentro ha de quedar jugosito. Sacamos, dejamos reposar unos minutos y desmoldamos.

Este postre se sirve en caliente, junto a una bola de helado, mermeladas al gusto y sirope de chocolate, pero como era añadirle demasiadas calorías más, nosotros lo tomamos con un poco de caramelo líquido. También podemos congelar lo que sobra y después darle un golpe de calor en el microondas ¡y listo para disfrutar!

Como veis, es supersencillo y rápido y de verdad que vale la pena, ¡¡está divino!!

¡¡Espero que os guste!!

Bon profit!!