Croquetas de setas y pollo {caseras}

Normalmente estas croquetas las suelo hacer solo con setas y quedan absolutamente deliciosas. Pero hace unas semanas, vi esta combinación con pollo en un blog amigo Las receptes del Miquel y me encantó, la forma de prepararlas es practicamente la misma que utilizo yo y el resultado supongo que igual de delicioso...jajajaa

En mi caso utilicé un variado de champiñones, setas de cardo y rovellons/níscalos y restos de pollo asado, pero bien podrían ser del caldo, de pollo al ajillo o sencillamente a la plancha, por lo que es una receta de aprovechamiento y os la recomiendo, queda divina!!!

Si queréis ver otras de mis recetas de croquetas, tenéis estas de pollo asado o estas de jamón.

Pues venga vamos con ella.

 Con esta receta participo en el Proyecto Reciclando Sabores, os dejo el enlace en el logo.

Ingredientes:

300 gr. de setas de nuestro gusto.

300 gr. de pollo asado limpio de piel y huesos.

Medio litro de leche entera.

Dos cucharadas soperas de harina.
Una cebolleta con la parte verde.
Una pizca de nuez moscada.
Aceite de oliva virgen extra.
Unos 25 grs. de una buena mantequilla

Huevos y pan rallado, para rebozar.

Sal.

Preparación:

Limpiamos bien las setas, las cortamos menudito y reservamos. En una sartén amplia, ponemos un chorrito de aceite de oliva, la mantequilla y pochamos la cebolleta, picadita, cuando comience a estar transparente, añadimos las setas, salpimentamos y dejamos cocinar a fuego medio bajo, hasta que estén tiernas. 

A continuación agregamos el pollo muy picadito a mano, o en picadora, le damos unas vueltas y ponemos la harina, la mareamos para que pierda el sabor a crudo, ahora incorporamos al leche, la nuez moscada, probamos de sal y removemos continuamente con unas varillas al comienzo y con una espátula de madera más tarde, dejamos cocer a fuego medio-bajo, hasta que se separe de la sartén. 

Entonces extendemos en una fuente amplia y vez tibia la cubrimos con papel film que toque la masa y dejamos enfriar en el frigorífico como una hora, aunque es mejor de un día para otro. Pasado ese tiempo, pasamos a formar las croquetas ayudándonos de dos cucharas. Las pasamos por huevo batido y pan rallado. Y las dejamos reposar tapadas en el frigorífico, una media hora, para que tomen más cuerpo, de esta forma no se abrirán al freírlas. 

Ponemos abundante aceite de oliva virgen en una sartén, cuando esté bien caliente, pero sin humear, procedemos a freírlas por tandas, no muchas de una vez, para que no se enfríe el aceite, las doramos, las vamos sacando sobre papel absorvente, las servimos recién hechas y ya las tenemos listas para disfrutar!!!

A nosotros nos gustan con tropezones, aunque a veces también lo hago todo más picadito, pues no todo el mundo quiere encontrarselos, de todas maneras quedan exquisitas, os lo aseguro. 

Espero que os gusten!!!

Bon profit..!!!