Pizza frita napolitana

Una forma diferente y deliciosa de cocinar la tradicional pizza. Según he leído es muy tradicional de la parte sur de Italia y sus orígenes se remontan a la segunda guerra mundial, en que las mujeres de Nápoles freían la masa de la típica y tradicional pizza, sin ningún tipo de relleno. Con los años se fue rellenando de diferentes maneras, aunque las más famosas son con ricotta y salami o esta que os traigo hoy de tomate, mozzarella y prosciutto o jamón cocido y pueden ser redondas o tipo calzone.

Hace tiempo que tenía ganas de publicar esta pizza y el Reto mensual y último del año del #Asaltablogs, me lo ha puesto en bandeja. Pues este mes le ha tocado ser asaltado a nuestro compi Juanan de Cuuking, un blog estupendo y muy ameno con muchas y deliciosas recetas. Peeerooo tenía este recetón que tanto me apetecía preparar y nos ha encantado a todos, tan crujientes y amorosas que han sido todo un éxito.

Me ha encantado tu cocina Juanan, es muy variada e internacional y tienes auténticas delicias. Otra de ellas te la pienso volver a "pispar" y tunearla tal como había pensado, que de poco te dije cual era, en uno de mis despistes...jajajaa De esta solo he tuneado la masa, utilizando una que en casa nos encanta, el resto es practicamente igual a la tuya y además he puesto mi truqui para masas blandas...jejejee Espero que te guste mi versión, para mi ha sido un placer dejar ese grupo con una receta tuya!!!

Sin más dilación, vamos con la receta.

Ingredientes y preparación de la masa, ver AQUÍ, pero con tan solo 25 gr. de levadura. (Salen cuatro pizzas calzone y una redonda).

Ingredientes relleno:

250 gr. de jamón cocido braseado, cortado en lonchas no muy finas.

150 gr. de salami en lonchas.

Quesos rallados de calidad, en mi caso mozzarella y emmental.

Queso pecorino en lascas.

Tomate frito a poder ser casero, ver receta AQUÍ.

Orégano.*Opcional

Aceite de oliva virgen.

Preparación: 

Una vez hecha y levada la masa, cogemos unas porciones de aproximadamente el mismo peso, en mi caso 6. Espolvoreamos harina en una superficie limpia y seca y procedemos a estirarlas bien finas. Las pasamos a papel de hornear y las vamos rellenando por capas y cantidades e ingredientes a nuestro gusto, dejando libres unos dos centímetros del borde.

Cerramos nuestras pizzas apretando bien los bordes para que no se abran al freír, pero sin hacerlos demasiado gruesos, (A mi unos me quedaron mejor que otros, pero todos cayeron...jajajaa) recortamos a su alrededor el papel de hornear, dejando espacio para poderlo coger bien y las dejamos reposar unos minutos.

En una sartén honda y amplia ponemos abundante aceite de oliva, cuando esté bien caliente, pero sin humear vamos poniendo en la sartén nuestras pizzas con el papel, (este es mi truqui para no deformar las masas y no quemarnos) cuando retome el hervor, retiramos el papel y las vamos regando con el aceite caliente. 

Les damos la vuelta con cuidado ayudándonos de dos espumaderas y en cuanto estén doradas las vamos sacando a una fuente con papel de cocina para que dejen el exceso de grasa. Servimos recién hechas y ya las tenemos listas para disfrutar!!! 

Al igual que las pizzas horneadas, siempre están mejores recién hechas, pero en el caso de que nos sobraran les podemos dar un golpe de grill y quedan divinas. También podemos rellenarlas con cualquier cosa que nos apetezca, en mi caso hice dos tipo calzone con samfaina y mozzarella, para los vegetarianos de la familia y les encantó. Así que imaginación al poder!!!

Espero que os guste!!!

Bon profit..!!!