Esta carne mechá, es muy típica de mi querida Sevilla y seguramente de media Andalucía, no tiene nada que ver con la clásica carne mechada, que como su nombre indica se mecha, osea se le introducen trozos de panceta, jamón o verduras a la carne ayudados de un mechador o de un cuchillo y acostumbra a ser un redondo de ternera o una cinta de lomo de cerdo.
Tengo que decir, pues sería imperdonable que no lo hiciera, porque la mechada clásica mi madre la bordaba!!!
Tengo que decir, pues sería imperdonable que no lo hiciera, porque la mechada clásica mi madre la bordaba!!!
Esta se hace con cabeza de lomo, también llamada chuleta de aguja deshuesada. Pero no por eso es menos exquisita, además que la cocino de la misma manera. Y de que nos da muchísimo juego, pues fría está a mi gusto más deliciosa y si la acompañamos de una ensalada verde con cebolleta y una mahonesa suave, es bocado de Dioses.
Ingredientes:
Dos kilos de cabeza de lomo, (aguja) de cerdo a poder ser ibérico, en un trozo.
Dos cebollas blancas grandes.
Un tomate maduro hermoso.
Dos dientes de ajo.
Una hoja de laurel.
Nuez moscada.
Pimienta negra de molinillo.
Aceite de oliva virgen extra.
Un vasito de brandy de calidad.
Un vasito de vino blanco seco, tipo manzanilla.
75 grs. de manteca blanca de cerdo para cocinar.
Sal.
Preparación:
Lavamos y secamos la carne, la salpimentamos abundantemente, ya que es una pieza grande. En una cazuela ponemos un chorro de aceite de oliva y 25 grs. de la manteca blanca, es la que le da ese color dorado tan bonito. Cuando esté caliente ponemos la carne y sellamos, dorándola bien por todas partes, para que no se escape el jugo al cocinarla. Sacamos y reservamos.
Entonces agregamos los ajos, las cebollas pelados y cortados groseramente y el tomate lavado y cortado en trozos grandes y salpimentamos. Lo sofreímos todo hasta que quede bien doradito, entonces volvemos a poner la carne, el vaso de vino y lo dejamos evaporar.
A continuación apagamos el extractor, (*ojo que esto es muy importante...!!!) y añadimos el brandy, flambeamos hasta que se apague la llama y agregamos el agua hasta la mitad de la carne, la hoja de laurel y la ralladura de nuez moscada.
Tapamos y dejamos cocer unas dos horas a fuego medio bajo, dándole la vuelta a la carne a media cocción. Para saber si está en su punto, le clavamos una aguja de cocina en el centro, si pincha bien ya está hecha.
A continuación apagamos el extractor, (*ojo que esto es muy importante...!!!) y añadimos el brandy, flambeamos hasta que se apague la llama y agregamos el agua hasta la mitad de la carne, la hoja de laurel y la ralladura de nuez moscada.
Tapamos y dejamos cocer unas dos horas a fuego medio bajo, dándole la vuelta a la carne a media cocción. Para saber si está en su punto, le clavamos una aguja de cocina en el centro, si pincha bien ya está hecha.
Sacamos la carne a una fuente y dejamos entibiar. Una vez tibia la ponemos encima de papel film doble sin cortar el resto y la untamos bien por todas partes con el resto de la manteca y espolvoreamos generosamente con la pimienta recién molida.
Envolvemos apretando un poco en el papel film y guardamos en el frigorífico hasta el momento de servir, mejor hacerlo la víspera. De este modo conseguiremos darle una forma bonita y nos será mucho más sencillo cortarla a nuestro gusto sin quitarle el papel, que se lo quitaremos después de cortarla muy finita o más gruesa.
Envolvemos apretando un poco en el papel film y guardamos en el frigorífico hasta el momento de servir, mejor hacerlo la víspera. De este modo conseguiremos darle una forma bonita y nos será mucho más sencillo cortarla a nuestro gusto sin quitarle el papel, que se lo quitaremos después de cortarla muy finita o más gruesa.
Ahora vamos con la salsa. Si nos ha quedado un poco ligera, la dejamos reducir un poco y la pasamos por el chino o el pasa purés, en su defecto también podemos pasarla por un colador. Pero no lo hagáis con la batidora, que pierde gracia y color. Y nos ha de quedar una salsa marrón oscuro, que os aseguro es muy gustosa.
La servimos en una fuente y a temperatura ambiente con la salsa bien caliente rociada por encima y el resto en una salsera y la podéis acompañar con unas socorridas patatas fritas, con alcachofas, berenjenas o calabacines fritos, un salteado de setas o como más os apetezca, porque todo le va bien. Y en frío es ideal como ya he comentado acompañada de una buena ensalada verde y una mahonesa o vinagreta. Y ya la tenemos lista para disfrutar!!!
No dejéis de hacerla, porque está realmente buena. Yo acostumbro a guisar en cazuelas de hierro, que es para las vitrocerámicas el equivalente a las cazuelas de barro para el gas. Y os aseguro que vale la pena, todo lo que hagas en ellas sale más gustoso y casi como antaño. Me encantan!!!
Espero que os guste!!!
Bon profit..!!!
Pues ya he visto que no me hace falta el mechador, pero de todas formas me lo traeré de Málaga, no sea que un día te dé la ventolera de hacer la receta y tenga que comprar otro aquí... Me encanta la receta, además, es una solución genial para una cenita sin complicaciones (eso sí, unas vez que está ya hecho, jejejeje...)
ResponderEliminarUn besote
Gracias guapa...!!! Tienes razón, una vez que está hecho te soluciona comidas o cenas y el mechador para la otra que ya haré cuando venga el fresquito....jajajaja
EliminarBesitos milll...!!!
Gracias por compartirla receta, personalmente conocía el mechado, el de introducir en la carne, verduras, panceta, etc. Pero tengo que reconocer que esté mechado es estupendo. Feliz domingo
ResponderEliminarGracias guapa...!!1 Es que no es mechado, aunque se le llame así...Eso si está de vicio...!!! jajajaja
EliminarBesitos y feliz domingo...!!!
Que ricooooo, nunca vi una receta así, otra para la agenda de pendientes.
ResponderEliminarUn beso
Gracias guapísima, es muy típica de mi tierra andaluza y en casa nos encanta...!!! Y que desastre soy todavía con las respuestas, casi siempre llego tarde...jajajaja
EliminarBesitosss y buen día...!!!