Pollo en salsa de tomate y pimientos

Que socorrido resulta el pollo y suele gustar a todo el mundo. Además de que se puede cocinar de mil maneras y todas ricas ricas, una de las formas más conocida y popular es con tomate. Y es bastante económico que eso también cuenta, aunque el de corral pica un poco más en el bolsillo, pero vale la pena por su textura y sabor. Hace tiempo publiqué una receta básica, de pollo con tomate y hoy os traigo una muy tradicional en mi casa y que siempre gusta a todos. 

En esta ocasión he utilizado muslos de pollo o jamoncitos, como los queramos llamar, para aprovechar de paso unos que tenía congelados y no eran muy grandes, pero podemos utilizar pechuga o contra muslo. Además es uno de esos platos ideales para dejarlos preparados o para un picnic y comerlo a temperatura ambiente, pues está delicioso.

Vamos con la receta.

Ingredientes para 4 comensales:

Ocho jamoncitos de pollo.

Una cebolla grande.

Un pimiento morrón(rojo) pequeño o medio grande.

Un pimiento verde tipo italiano, grande.

Un bote de 400 gr. de tomate triturado de calidad.

Dos dientes de ajo.

Dos cucharaditas de postre, de carne de pimientos choriceros.

Dos o tres hojas de laurel.

Una ramita de tomillo.

Un vasito de vino blanco seco.

Aceite de oliva virgen extra.

Pimienta de molinillo.

Azúcar.

Sal.

Preparación:

Limpiamos bien el pollo de plumones, lo lavamos con agua fría, escurrimos bien y salpimentamos. En una cazuela ponemos un buen chorro de aceite de oliva y doramos ligeramente los muslitos de pollo, a continuación echamos los ajos pelados y troceados groseramente. Hacemos lo mismo con la cebolla y cuando todo comience a tomar color añadimos las hojas de laurel y la ramita de tomillo.

Lavamos y cortamos los pimientos y los incorporamos a la cazuela, removemos y dejamos pochar a fuego medio bajo hasta que están un poco blandos, entonces agregamos la carne de pimientos choriceros, les damos unas vueltas, echamos el vino y lo dejamos evaporar unos minutos.

Pasado ese tiempo añadimos el tomate triturado, medio vasito de agua y una cucharadita de azúcar para la acidez del tomate, salpimentamos, medio tapamos y dejamos cocer a fuego medio hasta que la carne esté tierna y la salsa haya reducido a la mitad. Entonces apartamos, probamos de sal y rectificamos de ser necesario y dejamos reposar tapado hasta el momento de servir, pues es uno de esos platos que reposadito está más bueno.

Servimos bien caliente y con una guarnición de nuestro gusto, en mi caso unos chips de alcachofas que le van divinamente y estamos en temporada. Un buen pan blanco para mojar en la salsita y ya lo tenemos listo para disfrutar!!!

Espero que os guste!!!

Bon profit..!!!