Hasta hace unos días, dije que a mi el cous cous no me gustaba y así era. Sería por la mala experiencia en algunos restaurantes árabes, en el que te lo sirven tan solo cocido o demasiado especiado, pero no le veía la gracia y llegó hasta casi molestarme que lo pusieran de guarnición, pues me parecía casi como un arroz cocido sin nada más y que por mucho que los mojes en la salsa no saben a nada.
Pero como para algunos platos parece imprescindible, quise arriesgarme a hacerlo. Al ver varias recetas similares, vi que en algunas ponen además piñones o nueces y cebolla, pero no ponen champiñones, que lo mismo todas son divinas, pero como en casa a la peque los frutos secos no le van.
Así pues, cogí lo mejor de cada una e hice mi propia receta, que nos ha encantado hasta para comerla sola, sin más, y es que las pasas y los champiñones le dan un saborcito divino y si hubiese podido ponerle piñones o nueces ni os cuento!!!
Venga, vamos con esta deliciosa y sencilla receta.
Así pues, cogí lo mejor de cada una e hice mi propia receta, que nos ha encantado hasta para comerla sola, sin más, y es que las pasas y los champiñones le dan un saborcito divino y si hubiese podido ponerle piñones o nueces ni os cuento!!!
Venga, vamos con esta deliciosa y sencilla receta.