Cochinillo en adobo

Otra de las tapas tradicionales más extendidas por la geografía española, aunque en cada sitio se le llame de una manera diferente, cochino frito o carne de fiesta en Canarias, zorza en Galicia, magro o cochinillo en adobo en según que lugares de Andalucía, etc. Posiblemente lleve algún ingrediente de más o de menos según el sitio, pero al final siempre acaba frito o salteado a la plancha.

Siempre es mejor preguntar antes de pedirlo en un bar o restaurante, porque el nombre puede llevar a confusión, ya que no tiene nada que ver con el típico cochinillo lechal. Y esto no es otra cosa que carne magra de cerdo, cortada en taquitos pequeños, puesta en adobo y después cocinada. 

Yo la sigo llamando por el nombre con la que la he conocido siempre. Cochinillo en adobo, ea!!! Y  formó parte del menú, (junto a otras cositas y  las patatas bravas que publiqué el lunes) de  una comida informal de hace unos días, que fue todo un éxito!!!

Comencemos con esta sencilla y sabrosa tapa.

Ingredientes:

Un kilo de carne magra de cerdo, bien limpia de grasa y nervios y cortada en trocitos pequeños.

Una cucharada sopera colmada de orégano.

Una cucharada sopera rasa de pimentón dulce de calidad.

Una cucharadita de pimentón picante de calidad.

Una cucharadita de comino molido.

Una cucharadita de pimienta blanca de molinillo.

Una cucharadita de tomillo seco y otra de romero seco.

Una cucharadita de cayena molida.

Un vaso de vino blanco seco, tipo manzanilla.

Un vasito de aceite de oliva virgen extra.

Un vasito de vinagre de sidra.

Dos hojas de laurel.

Tres dientes de ajo.

Sal.

Preparación:

Lavamos, escurrimos y secamos la carne. Hacemos un majado grueso con los dientes de ajo pelados, un poco de sal, el tomillo y el romero, añadimos las demás especias y lo desleímos todo con el vino. Lo vertemos en un cuenco grande, junto con el resto de los ingredientes del adobo y la carne, mezclamos bien, tapamos y dejamos reposar en el frigorífico al menos 24 horas, removiendo de vez en cuando.

Pasado ese tiempo ponemos una sartén amplia al fuego con un chorretón de aceite de oliva, cuando tome calor añadimos la carne bien escurrida del jugo, lo freímos a fuego fuerte hasta que esté doradito, removiéndolo a menudo. Lo servimos recién hecho junto con el jugo que haya soltado, lo espolvoreamos con un poquito de orégano, acompañamos de un buen pan y ya lo tenemos listo para disfrutar!!!

Como veis es super sencillo de hacer y está buenísimo. Espero que os guste!!!

Bon profit..!!!